martes, 30 de octubre de 2012

Economía durante el Franquismo y Transición


DE LA AUTARQUÍA A LA CRISIS DE LOS SETENTA.
Los casi 40 años de dictadura franquista no son homogéneos, el periodo está marcado por dos situaciones críticas en el plano económico e institucional. El modelo autárquico de la postguerra y la crisis de mediado de los setenta. Entre medio un crecimiento forzado marcado por los Planes de Desarrollo.
a.
Autarquía, crisis y Plan de Estabilización (1940-1963). Este periodo se caracteriza por el marcado intervencionismo gubernamental y el aislamiento exterior, forzado por las circunstancias, si, pero también por los principios económicos que asume el régimen tras la contienda. Aunque a finales de los 50 se había conseguido salir del estancamiento, lo que se refleja en una tasa anual media de crecimiento del PN por encima del 5% y un crecimiento de la producción, este patrón de crecimiento era insostenible. Por 3 motivos: el creciente desequilibrio en las cuentas exteriores, con importaciones desorbitadas. La creciente inflación a partir de 1955 y el comportamiento desordenado del sector público, con creciente déficit presupuestario. A finales de los 50 la situación era critica, alejada del modelo europeo (asentamiento de OI, consolidación de la economía social de mercado, estabilización económica y convertibilidad entre monedas y firma de Roma 57)
Surge entonces el PLAN DE ESTABLILIZACIÓN de 1959, fijando una reorientación estratégica que liberara la economía del rígido intervencionismo existente, alineándose con las economías de mercado y abriéndola al exterior.
Plan del 59:
Objetivos: Situar la economía en línea con los demás países del mundo occidental y liberarla de intervenciones innecesarias.
Contexto de apoyo: Formación de un Gobierno sólido en 1957 // Amplio consenso entre las instituciones españolas // Asesorado y apoyado por OEI.
Políticas de ajuste:
 Orientadas al equilibrio presupuestario y a la estabilidad monetaria interior: Reforma fiscal con incremento de ingresos públicos // Topes de gasto en los presupuestos // Restricción del crecimiento monetario // Contención de la demanda interna
Orientadas al equilibrio externo y a la estabilidad monetaria exterior: Integración de la moneda española en el sistema monetario internacional // restricción a las importaciones + fomento de las exportaciones // aumento de la entrada de divisas.
Reformas estructurales: Apertura e integración exterior (Adhesión al FMI, Banco Mundial, etc.) // Liberalización de los sistemas de pagos exteriores // Elaboración de un nuevo Arancel ajustado a las convenciones de Bruselas, aunque todavía proteccionista. Racionalización del aparato político-administrativo. Flexibilización del sistema productivo y del mercado de trabajo. En resumen, el modelo autárquico queda totalmente agotado y el Plan del 59 supone una operación de envergadura que reordena la economía española, con resultados netamente positivos.
b.
Etapa de los Planes de Desarrollo: Desde el 63/64 hasta el 73, supone la puesta en marcha de los Planes de Desarrollo, que nacen tras el informe del Banco Mundial sobre la situación y el potencial desarrollo de la economía de España. Su esencia era la programación de políticas de desarrollo para periodos de cuatro años, con carácter vinculante para el sector público e indicativo para el privado. El Organismo responsable era la Comisaría del Plan de Desarrollo, que actuaba como superministerio de economía, Se elaboraron cuatro pero solo se aplicaron los tres primeros. (Cuadro pag.19). El balance general de estos planes puede considerarse positivo, ya que ayudaron a la expansión de la producción y el cambio estructural de la economía española, por el contrario se señalan como aspectos negativos la dispersión de objetivos y el incumplimiento de programas. La fase de Planes coincide con la expansión económica internacional, la edad de oro del Estado del Bienestar. La economía española en esta época se va a caracterizar por:
-          Notable crecimiento, de hasta un 6,5%, del PIB, pero bastante errático y con oscilaciones
-          Generación de empleo moderada
-          Alto grado de inestabilidad en la evolución de los precios. Provocó medidas de ajuste anti inflacionista o stop and go.
-          Fragilidad en la balanza de pagos y déficit exterior.
En resumen, la etapa de los Planes de Desarrollo supuso un proceso de crecimiento acelerado y cambio estructural, acompañado de desequilibrios en los años sesenta que sin embargo fueron mejorando en los primeros setenta, época en la que la economía española ha presentado sus mejores resultados conjuntos en todas las variables analizadas.
c.
Crisis y transición: El periodo de bonanza económica se trunca con la crisis del petróleo y con la crisis política interna que vive España en los últimos compases de la dictadura, con el tiempo se ha llegado a entender que se estaba produciendo una autentica ruptura del sistema económico.  (Bretton Woods). Además se empieza a producir una auténtica revolución tecnológica. Ambas crisis se solapan (la española y la internacional) y se llega al periodo de la transición en una fase de inestabilidad e incertidumbre, donde los problemas económicos se van agravando hasta alcanzar niveles críticos. Varias notas definen este periodo:
-          Caída sustancial de crecimiento de la producción.
-          Descenso continuado del nivel de empleo a partir de 1975.
-          Presiones inflacionistas en continuo aumento
-          Elevado desequilibrio externo, caída de las reservas de divisas, se recurre a la deuda externa.
Por lo tanto en 1977 la situación se podía considerar crítica, además los problemas asociados a la transición política sumaron cierto desorden, donde la multiplicidad de paquetes de medidas económicas contradictorios y zigzagueantes no son sino manifestaciones de la falta de rumbo ante una situación desbordada. Será tras las elecciones de 1977 cuando se pongan en marcha un fuerte conjunto de medidas para afrontar la crisis. Programa de saneamiento y Pactos de Moncloa (pag24). Medidas de choca para ajustar el peligroso rumbo de las magnitudes económicas básicas.
Estas medidas tuvieron cierto éxito:
-          Las tendencias a una inflación desbordada se truncan: el IPC cae un10%  en 2 años.
-          Las cuentas exteriores mejoran apreciablemente: se reduce el deficit comercial y aumenta espectacularmente el saldo servicios.
Así como también entrañaron ciertos costes en crecimiento y empleo.
Sin embargo, los éxitos del programa no impidieron que poco a poco se fuera diluyendo, lo que tuvo que ver con la resistencia de algunos sectores a la profundización de las reformas propuestas y a la ruptura del consenso político que propició el acuerdo. Si bien los años del 80 al 82 suponen un paréntesis, en el plano de corrección de los desequilibrios macroeconómicos los primeros años del PSOE se sienten positivamente en la inflación y en el crecimiento exterior, pero no en otros frentes abiertos.
d.
Conclusiones:
-          La economía española experimenta un proceso de crecimiento acelerado en el cuarto de siglo transcurrido entre los últimos cincuenta y los primeros ochenta, periodo que se enmarca entre dos etapas de crisis y transición.
-          El crecimiento viene acompañado de notables transformaciones estructurales que modifican la matriz de organización y funcionamiento de la economía española. Pasa de la base agraria al desarrollo de industria y servicios. Incremento del uso del capital y mejora del capital humano y del nivel tecnológico.
-          Elevación de la apertura exterior y de la integración territorial.
-          Se produce un proceso de urbanización y se polariza la residencia y la actividad productiva hacia una serie de ejes de desarrollo.
-          El rápido crecimiento deja sentir ciertas inestabilidades y desequilibrios no marginales de carácter recurrente.
-          La conciencia de los desequilibrios se percibe a través de shocks externos.
-          Los dos programas de estabilización económica identifican como problemas de fondo la necesidad de reestructurar el ordenamiento económico optando por la liberalización, la flexibilización y la apertura.

LA INTEGRACIÓN EN LA COMUNIDAD EUROPEA
Con los años 80 se abre una nueva etapa para la economía española con la firma del acuerdo de adhesión a la CE como hito, lo que cambia sustancialmente los pilares institucionales de la economía española. A lo que se suma el fin de las convulsiones internacionales y de la transición interna. En enero de 1986 se produce la integración y se abre una dinámica de transformación profunda.
a)      Los escenarios de referencia:
Se pueden señalar una serie de escenarios en los que se sitúa la reestructuración del orden económico internacional.
-          Actitud general a favor del relanzamiento ordenado del comercio y las relaciones económicas internacionales, superando las tentaciones neoproteccionistas. La apertura de la Ronda Uruguay en el seno del GATT  la creación de la OMC.
-          En el plano monetario, un nuevo orden que sustituye a Bretton Woods, espablecimiento de areas de referencia de las principales divisas internacionales, se evita los problemas asociados a la volatilidad del tipo de cambio. Instutucionalización del Sistema monetario Europeo.
-          Tendencia al desarrollo de procesos de integración económica regional.
-          Progresiva globalización de los procesos económicos.
-          Revolución tecnológica.
-          Flexibilidad de los sistemas productivos para adaptarse a los cambios del entorno,
-          Irrupción de los nuevos países industrializados o países emergentes, con alta agresividad exportadora.
-          Preocupación por la estabilidad y el equilibrio de las variables macro consideradas fundamentales así como la búsqueda de la eficiencia en la asignación de recursos como principio básico del sistema económico.
Todos estos referentes se reflejan en la dinámica que ha seguido la CE, la firma del Acta única en el 86 supuso el inicio del mercado interior desde su entrada en vigor un año mas tarde, que fue acompañado de unas series de políticas comunitarias orientadas a la convergencia momentaria, la cohesión económica y social, etc. Mas tarde, en 1989 el Informe delors sobre la UEM sentará la base del TUE de Maastrich del 92, que define el proceso de constituciónpaulatina de un autentico espacio económico integrado por la libertad de circulación de bienes, servicios y personas. A esto se añade una convergencia previa de algunas magnitudes económicas fundamentales y a la ampliación a quince del número de miembros y posteriormente otros países del centro y el este de europa.
b)      Los problemas a resolver y la estrategia de la política económica.
El Programa Económico a Medio plazo fija el objetivo central del Gobierno socialista en la generación de empleo subordinado al alcance de unos objetivos intermedios muy precisos, tales como la reducción de la inflación, del déficit exterior, del déficit publico y al incremento de la inversión privada. Por otra parte, los desequilibrios de la economía española tal como lo entiende este Progtama, se centran en las excesivas alzas salariales, el elevado defecit de la Admin P. consecuencia de un gasto público desbordado. La idea es pues formular una estrategia global en la que se incluyeran de forma consistente los ajusten necesarios para el equlibrio macroeconómico, junto con las reformas necesarias para la modernización del sistema económico y su adaptación al nuevo entorno en el que ahora participa ela economía española. El horizonte temporal del Programa será de cuatro años con revisión anual en función del cambio de escenarios y de resultados alcanzados.
Contemplaba a su vez los siguientes problemas de fondo:
-          Ajuste energético, proceso de racionalización y eficiencia que redujera la dependencia externa de España.
-          Necesidad de reconversión industrial, modernización y transformación de la agricultura y  apostar por los llamados sectores de futuro. Falta de competencia en el sector servicios.
-          Rigidez en los mecanismos de contratación laboral y consecuencia de los costes laborales en cuanto al mercado de trabajo, falta de adecuación funcional del sistema educativo y de formación profesional.
-          Necesidad de sanear el sector público empresarial
-          Necesidad de revisión del sistema de la Seguridad Social, anticipando los desequilibrios financieros.
-          Problemas específicos institucionales y estructurales que afectan a las PYMES.
-          Preocupación por la mejora de las infraestructuras físicas y la dotación de capital humano y capacidad tecnológica.

c)       La evolción de la economía española tras la integración.
El año 1985se puede tomar como punto en el que se abre una nueva etapa en el desarrollo de la economía española. El nuevo gobierno había terminado por asumir los principios de actuasción auspiciados por las instituciones internacionales, consagrándose al pricnipio rector del saneamiento o ajuste, a través de un conjunto integrado de acuaciones que aseguraran el equilibrio económico interno y externo. La clave para el relanzamiento de la actividad se cifraba en la inversión privada y de manera secundaria en la demanda exterior, como elemento catalizador se confiaba en el ingreso en la CEE.
En la primavera del 85 se adoptarán una serie de medidas que tenían como meta el estimulo del consumo privado y la recuperación de la inversión privada mediante el incentivo fiscal. A partir de 1986 la economía española entra en una senda de expansión sostenida a un ritmo apreciable. La demanda interior juega un papel importante, pero hay que subrayar el fuerte consumo nacional tanto público como privado, lo que traería ya en los 90 efectos perversos o al incidir en la caída del ahorro nacional en el 88 y en la tensión inflacionista del 89 y en un nuevo desajuste de las cuentas exteriores. Todo esto nos deja una lección relativa a lso peligros de la inconsistencia entre las políticas de gasto y la política monetaria. El saldo exterior volvió por tanto a los números rojos, por lo que volvia a resurgir el déficit en la balanza de pagos. La necesidad de financiación se cubría aparentemente por la entrada de capital extranjero, pero que tenían un alto componente de volatilidad por lo que podía invertir sus signo como ocurrió en los primeros noventa. La profucción agraria y pesquera se elevo ligeramente,pero con fuertes oscilaciones encontrando su contrapunto en el notable auge que experimentó la construcción, estimulada por el proceso de formación de capital de esos años. El sector económico siguió la tendencia a la terciarización de su estructura productiva. La recuperación del crecimiento económico supuso la mejora de nivel de empleo en casi dos millones desde el 85 hasta el 91, la productividad siguió elevándose esos años. La situación del sector empresarial mejoró apreciablemente con la recuperación del excedente de explotación, gracias al relanzamiento de las ventas y la contención de los costes laborales y las ganancias de productividad. La bonanza general empieza a truncarse a partir del 88/89 cuando se descubren signos de inflexión en la senda del crecimiento saneado. En definitiva, los éxitos alcanzados por la economía en torno al 85 nublaron la visión de los responsables gubernamentales que hicieron olvidar las cuestiones estructurales pendientes, las fragilidades tradicionales del modelo de crecimiento.